lunes, 6 de septiembre de 2010

Homenaje a René "el Tino" Oberlin

Un 6 de septiembre, hace 33 años, la dictadura nos arrancaba al compañero René Oberlin. Para recordarlo colgamos a continuación lo que Ernesto Jauretche y Gregorio Levenson escribieron en el libro "Héroes, historias de la Argentina Revolucionaria".



Semblanzas
El "Tino" Oberlin y sus Hermanos

Pablo Neruda preguntaba:
"¿Cómo se puede crecer en un desierto de sal?"
Y el poeta brasilero Thiago de Melo
sin proponérselo quizás, le contestaba:
"es que tenemos que encontrar los colores ciertos,
para seguir construyendo la primavera".


René onorio Oberlin nació en San Jerónimo Norte, provincia de Santa Fe, el 18 de Marzo de 1941.
Perteneció a una familia militante de ocho hermanos, de la cual era el hijo mayor. Estudió filosofía en el Seminario Metropolitano de la capital de su provincia. Antes de ordenarse sacerdote se incorporó a la lucha social. Eligió el movimiento sindical como el espacio para su desarrollo político y fue el primer Secretario General del Sindicato del Seguro de Santa Fe, al que organizó mientras trabajaba en la Cooperativa de Seguros La Única.
Los sesenta venían cargados de pasión revolucionaria, de esperanza, de alegría militante, de solidaridad, de primavera política. Era el todo o nada. La idea del Poder no tenía nada que ver con la gris complacencia hacia las reglas de juego ajenas y lejanas sino con la capacidad de desafiarlo en su misma esencia. El lance de honor era reconstruirlo desde la solidaridad y la lucha social, reinventarlo para ponerlo al servicio de los más débiles, entenderlo como el territorio colectivo que iba a ordenar los espacios de todos.
Las sucesivas dictaduras militares, la proscripción del peronismo y sus organizaciones, los intentos oficiales y militares de destruirlo, alimentaron la resistencia popular que finalmente, y en plena dictadura, se transforma en proyecto armado. Eran varios y diversos los actores. René fue socio fundador de Montoneros.
En el 71 lo dieron por muerto en un enfrentamiento en Rosario. En el operativo detuvieron a su esposa, Ana, a quien torturaron de manera salvaje. René apareció, semanas después, en la cárcel de Villa Devoto. Ana ya estaba allí.
Poco después detuvieron a Rita Oberlin y su marido. Comenzó un via crucies interminable -el buque Granadero, Resistencia, Rawson, nuevamente Devoto- hasta el 25 de mayo de 1973, cuando el gobierno electo concedió la amnistía general a todos los presos políticos.
[...]
René Oberlin cayó un aniversario del Día del Montonero: el 6 de septiembre de 1977. Un supuesto enfrentamiento, aunque algún testimonio afirma que "se tomó la pastilla".
[...]
Dante marchó al exilio en 1976 [...] su diálogo con René, el hermano mayor, sigue así:
"No sé, Tino, si sabés cuánto te admiraba. Las broncas que tuve que aguantar cuando te llevaba ropa limpia al Seminario y los vaguitos del barrio me cargaban porque tenía un hermano casi cura. No sé bien dónde empieza la historia. Pero no tengo dudas que fue en nuestro Santa Fe, en el compromiso visceral, intransferible, definitivo, explicable y entendible, con los despreciados, excluidos, expulsados de la historia cotidiana. Nunca te eneraste de las envidias adolescentes que tuve a causa de los chocolates que la vieja te mandaba porque los merecías pero que no alcanzaban para todos. Te hablaba de mi sindicato gráfico, de las luchas, de las esperanzas de cambiar todo. Escuchabas con atención, me contabas de las charlas con los compañeros, con tus curas amigos, de tus nuevos y viejos sueños, de tus compromisos futuros. Tu fidelidad, la que te acompañó hasta el seis de Septiembre de 1977, te imponía códigos de lealtad como para que nunca me enterase de los problemas que rondaban tu espíritu inquieto".

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